Predicción  

En Sotillo nos dirigimos hacia la parte baja del pueblo donde encontramos un pequeño merendero junto al río Truchas. Para comenzar la ruta cruzaremos el puente que encontramos junto al merendero e inmediatamente después sale a nuestra derecha el sendero que está señalizado y que en los primeros metros suele estar muy embarrado debido a los pequeños regatos que por el circulan.

El sendero nos adentra rápidamente en un húmedo y virgen bosque plagado de acebos, robles, castaños y avellanos, e incluso con suerte podremos observar algún corzo o jabalí. En verano gozaremos de una estupenda y fresca sombra durante casi todo el recorrido. El camino no tiene pérdida ya que una vez tomado el sendero no lo abandonaremos hasta llegar a la cascada.

El trayecto desde Sotillo es todo subida, pero no lo acusaremos demasiado pues vamos superando el desnivel suavemente, salvo un pequeño tramo que se nos hará un poco más duro. Al final de la ruta y a medida que nos vamos acercando comenzaremos a oír la caída del agua, hasta que al cabo de aproximadamente 1 hora y 45 minutos de camino llegamos a la cascada, la cual podremos observar desde un pequeño mirador de madera.

Para volver a Sotillo existe una ruta alternativa que parte a la derecha del mirador si miramos hacia la cascada. Hay que advertir que la bajada es muy empinada e incluso en los primeros tramos tendremos que utilizar las manos para destrepar por el sendero.